La ecléctica formación de Bunge, lo convierte en un científico capáz de opinar de manera vehemente tanto de política como de economía, de cultura como de mercado. Creo que él ve en lo comercial el gran talón de Aquiles que corrompe tanto a la ciencia como al arte. Es por ello que asigna una gran importancia al presupuesto que los países destinan a investigación: este tipo de inversión pública tendrían el don de encauzar las investigaciones en la senda de lo socialmente útil y no, como sucede con la promoción privada, en lo mercantilmente redituable. También asume una postura polémica frente a técnicas como la fertilización asistida, la cual entiende como una especie de “boicot colectivo” en un mundo superpoblado y al límite de su capacidad natural de equilibrio ecológico. De todos modos aquí surge una contradicción, dado que la misma ciencia ha generado avances en medicina, tecnología y otras ramas que le permiten a él dar esta nota a sus 88 años de vida. Y creo que desde una mirada totalmente descarnada, la longevidad sería también un atentado contra el medio ambiente. Por ello hay que ser cuidadoso al momento de ser crítico, para no quedar en la incómoda posición de objetar aquello de cuyos beneficios estoy haciendo usufructo.
Respuesta Nº8: considero que están en lo cierto las afirmaciones de Bunge, porque demandamos energía, agua, alimentos, sin mirar las consecuencias que conlleva producir esto, la energía se produce en plantas nucleares, las reservas de agua escasean la producción de alimentos agotan muchas tierras incluyendo la acumulación de plástico y luego los reciduos que estos producen, sumando a estos agravantes, la caza furtiva, los desperdicios industriales, etc. En conclusión como dice el autor somos la especie que pone en peligro las demás especies. Ezequiel Godoy, Andrea Ochoa
La ecléctica formación de Bunge, lo convierte en un científico capáz de opinar de manera vehemente tanto de política como de economía, de cultura como de mercado. Creo que él ve en lo comercial el gran talón de Aquiles que corrompe tanto a la ciencia como al arte. Es por ello que asigna una gran importancia al presupuesto que los países destinan a investigación: este tipo de inversión pública tendrían el don de encauzar las investigaciones en la senda de lo socialmente útil y no, como sucede con la promoción privada, en lo mercantilmente redituable.
ResponderEliminarTambién asume una postura polémica frente a técnicas como la fertilización asistida, la cual entiende como una especie de “boicot colectivo” en un mundo superpoblado y al límite de su capacidad natural de equilibrio ecológico. De todos modos aquí surge una contradicción, dado que la misma ciencia ha generado avances en medicina, tecnología y otras ramas que le permiten a él dar esta nota a sus 88 años de vida. Y creo que desde una mirada totalmente descarnada, la longevidad sería también un atentado contra el medio ambiente. Por ello hay que ser cuidadoso al momento de ser crítico, para no quedar en la incómoda posición de objetar aquello de cuyos beneficios estoy haciendo usufructo.
Respuesta Nº8: considero que están en lo cierto las afirmaciones de Bunge, porque demandamos energía, agua, alimentos, sin mirar las consecuencias que conlleva producir esto, la energía se produce en plantas nucleares, las reservas de agua escasean la producción de alimentos agotan muchas tierras incluyendo la acumulación de plástico y luego los reciduos que estos producen, sumando a estos agravantes, la caza furtiva, los desperdicios industriales, etc. En conclusión como dice el autor somos la especie que pone en peligro las demás especies.
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